jueves, 3 de abril de 2008

Capas de Sueños.

En Cita de Morfeo: “¿Nunca has tenido un sueño que pareciera muy real? ¿Cómo sabrías entonces diferenciar sueño de realidad? El hacer creer que se vive una existencia normal es un poder muy grande, una forma de control terrible.”

Esta tarde, en mi sesión de sueño diario, he tenido un sueño realmente acojonante.

Aparecía saliendo de mi antiguo instituto para dirigirme hacia casa, vestía absolutamente normal pero en vez de mis botas llevaba mis zapatillas de andar por casa. La cosa es que estaba lloviendo, y empezaba a correr, no para no mojarme sino porque me apetecía. Me sentí magnífico. Al llegar al portal de mi casa, llamaba al timbre pero nadie me respondía, me apartaba y volvía a entrar al portal para volver a llamar. Nada. Salía del portal y empezaba a levitar, todo parecía muy real hasta entonces por lo que entendí que era un sueño y me quise despertar, me empecé a golpear la cabeza.

Me despierto, me levanto y me dirijo hacía la cocina. Pasando por delante de la puerta del comedor, mi madre hablaba por teléfono. Me adentré en la cocina y me bebí tres vasos de agua, al volver hacía mi habitación para vestirme (no es que fuera desnudo, nunca he dormido desnudo, lo que solo llevaba el pantalón de mi pijama… como actualmente siempre duermo) y pasar por delante del comedor… sobre la mesa, había tres diarios de títulos no reales, uno de ellos me chocó: “Playtoral”, ¿una ingeniosa broma de mi subconsciente? ¿una mezcla entre Play-Boy y Santoral? ¿un juego de palabras entre Pleito (sería su pronunciación inglesa, significando algo falso, una farsa) y Oral (de voz, de palabra), muy curioso para el título de un periódico no? Bueno, en resumen, que ahí es donde he sabido que eso era un sueño aún y ya asustado me he querido despertar del mismo modo… golpeándome en la cabeza.

Así que, me despierto, me levanto y me dirijo hacía la cocina bastante asustado por la experiencia, todo era exactamente igual. Esta vez no he mirado a través de la puerta de la cocina si mi madre hablaba por teléfono o no, solo me adentré en la cocina y me bebí tres vasos de agua. Al volver a mi habitación, esta vez si miré y mi madre estaba hablando por teléfono… pero no tenía voz, no oía nada, dejé el vaso sobre la mesa y no oí el golpe… decidí que eso era un sueño de nuevo, muy asustado, y me golpeé la cabeza de nuevo varias veces despertando.

Está vez, ya ni siquiera me levanté… todo era exactamente igual, la misma imagen, y me empecé a golpear el coco. Me desperté.

Y todo era exactamente igual, yo con mi pantalón del pijama y realmente acojonado me levanté y con paso tembloroso me dirigí hacía la cocina. Yo creía que era un sueño ya, así que para romper el esquema no me metí en la cocina sino directamente en el comedor… cogí la jarra de agua que usamos para comer y cenar (aún tenía agua de la comida) y empecé a engullir hasta vaciarla, mientras miraba como mi madre hablaba por teléfono (y tenía voz) y buscaba esos falsos periódicos que no estaban. Todo bien, era la vida real, pero ya había llegado el punto en el que dudaba de su realidad… no se si os podéis hacer la idea de mi “mal rollo” que llevaba encima, de hecho me ha costado asimilar que esto aún sea real… o acaso, como pasaba en Matrix, ¿no podría ser todo un sueño? ¿podría haber una capa más? ¿somos el mero sueño de una realidad paralela, una realidad real?

Y para quitar un poco de malrollismo del tema, le dejaremos investigar al señor Martin Landau, ya que el tipo lo hacía muy bien en “La inquietante hora de Landau” (El Informal), supongo que ayudado por su también acojonante presencia.

4 comentarios:

Homo Insanus dijo...

Sueños dentro de sueños, sí. Afortunadamente, nunca los he tenido (que yo recuerde) de más de dos repeticiones y no tan reales, así que comprendo que te afectara tanto, porque se pasa mucho miedo.

Los multiversos, como explicación para estas experiencias, siempre me han parecido muy atractivos. Quizá echaste un vistazo por una ventana a otros Kelembor, que despertaban sedientos, rumbo a sus cocinas, a beber agua :).

jajjajjaj, ni caso a lo de los universos paralelos, es broma, no quiero inquietarte más. Los sueños a veces dan malas pasadas, como ése tuyo, no creo que tengan más importancia que lo que son: meras "desfragmentaciones" de mantenimiento del disco duro del subconsciente.

Saludos

Anónimo dijo...

Yo también he pasado por esa experiencia, sueño dentro de sueño, pero siempre eran situaciones totalmente ficticias y me daba cuenta enseguida de que seguía durmiendo. Si que da mal rollo.

También he tenido sueños de los que no he querido despertar y menos para ir a trabajar. De hecho la sensación de "estar enamorado" solo la he tenido en sueños (creo que sabéis a lo que me refiero). ¿Quien querría despertar de un sueño así.

Homo Insanus dijo...

Ostias, sí, estar enamorado en sueños. De esos sueños que te despiertas y tratas de quedarte frito para enlazar de nuevo y ya no hay forma, XDD.

Anónimo dijo...

mira que tengo sueños raros pero por suerte siempre consigo saber cuando sueño y cuando no, nose si t servira pero me dijeron una vez k cuando sueñes intentes mirarte las palmas d las manos es una especie de aunto control del propio sueño puede parecer una gilipollez pero es xungo d la ostia.