viernes, 7 de marzo de 2008

Disperso.

Bilbo Bolsón, personaje mítico donde los haya, decía angustiado: “Me siento disperso como mantequilla esparcida sobre demasiado pan”. Tal vez cansado por la rutina de tantos años que no cambian o por la sombra que El Anillo reflejaba sobre su corazón. No lo sé, pero no hay frase que case mejor con mi actual estado de ánimo.
Desde pequeño aprendí a esperar lo peor en esta vida, para que cuando me ocurriera algo bueno sintiera alegría. El sistema funciona, aparentemente… pero te impregna de un estado de ánimo no muy aconsejable.
Así que, yo os aconsejo al igual que la Iglesia: “haz lo que te diga, no lo que yo haga”. Disfrutad de todo lo que os complace, ser felices con aquellos a los que apreciáis… y cuando lo que os complazca o los que apreciéis os defrauden, a otra cosa mariposa. Vuestra frialdad para superar esos momentos, el no mirar atrás (o mejor dicho, no vivir en el pasado) y el no pensar, ni siquiera plantear esas preguntas existenciales, os darán lo que necesitáis. “Cuando un problema no tiene solución, ¿de que te preocupas?; cuando un problema tiene solución, ¿Dónde esta el problema?”. Todo se puede complicar, el simplificarlo nos da el poder.
Tal vez sea demasiado tarde para mí, no voy a ponerme a cambiar mi forma de pensar… pero os aconsejo que evitéis ser así, o acabareis cansados y desinteresados por todo… dispersos sobre demasiado pan.

Una canción: “Lonely Day” – System of a Down.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

wapoo, como k es demasiado tarde para cambiar tu forma de pensar ni k fueras un viejito XD, tu mismo te das la solucion al problema hay que aprender a vivir eL momento y cuando eso se joda pasa pagina, es duro pero sino te pasas la vida hecho una mierda.
Animo wapo y caepe diem aunk te revienten!!!!!!!

Homo Insanus dijo...

Yo también tengo una peculiar forma de ser que más de una vez me ha metido en problemas. Nada grave, sólo decepciones y desengaños con gente cercana. Pero es cierto lo que dice Rassell, siempre se puede cambiar, aunque cuesta mucho esfuerzo hacerlo.

Ser un poco negativo y pesimista no es malo, Kelem, opino yo. Pero sólo un poco.